Por Noelia Hontoria 
Todos llevamos en el móvil o en el portátil información muy importante, desde documentos de trabajo hasta fotografías personales. Perder nuestra vida digital es hoy en día casi tan dramático como perder el bolso o la cartera, por eso, hoy quiero hablarte de un producto muy interesante que acaba de pasar por mis manos: el nuevo Kingston XS1000 de 2 TB en color rojo.
¿Para qué sirve un SSD portátil?
Tal vez te estés preguntando para qué puedes necesitar tú un producto como este. ¿Es para todos? Rotundamente: sí. Tanto si eres una persona muy techie como si no, tanto si te haces viajes ultralargos como si lo tuyo son más escapadas de fin de semana… Sea cual sea tu caso, un SSD portátil es ese tipo de productos que hay que tener «de fondo de armario».
Un SSD portátil como este Kingston XS1000 es, para mí, un salvavidas. Es una forma muy cómoda de hacer copias de seguridad de las fotos y archivos de tu móvil o cualquier otro dispositivo, estés donde estés y sin que te ocupe apenas nada de espacio. El disco duro en sí cabe en la palma de la mano, pero en cuenta que debes llevar también contigo su cable de USB-C a USB-A y su adaptador USB-A a USB-C. Ambos accesorios vienen incluidos en la caja del producto.
¿Para qué lo utilizo yo? Principalmente para llevarlo de viaje (cuando son muy largos) y poder hacer una copia de seguridad de mis fotos. Por ejemplo, próximamente tengo un viaje por Japón durante tres semanas y me parece imprescindible invertir en un dispositivo como este para hacer copias de seguridad de mis fotos y vídeos cada noche cuando llegue al hotel. Y es que hay fotos que no se pueden repetir y en este tipo de viajes sería un drama si el móvil tiene un accidente o se pierde, por eso, tomar la precaución de guardar las fotos del día en un SSD portátil es una idea muy buena.
También lo utilizo para eventos de trabajo, para esas fotos o documentos que necesito que estén a buen recaudo hasta que llegue a casa.
Cómo usar el Kingston XS1000
Para usarlo, es tan sencillo como conectar el SSD Kingston XS1000 con su cable al dispositivo que quieras utilizar. Por ejemplo, si es un portátil, puedes usar directamente el USB-A, si es un smartphone necesitarás acoplar también el adaptador USB-C. Inmediatamente, sin que tengas que hacer nada, tu equipo lo reconocerá y listo, ya puedes empezar a copiar o visualizar tus archivos. Un plug and play en toda regla. No necesitas descargar ninguna app externa ni configurar nada.
Desde el explorador de archivos verás la Unidad USB Kingston. Ahora, solo necesitarás copiar las fotos o archivos que deseen guardar aquí a buen recaudo. En mi caso, lo he utilizado con un smartphone Android (concretamente el HONOR 200 Pro que es el móvil que estoy probando actualmente) y he tardado un minuto en pasar 500 fotos desde la galería al SSD portátil. En cada dispositivo el menú o las opciones exactas pueden variar, pero es muy intuitivo y muy fácil de usar.
Características técnicas del Kingston XS1000
Vamos con un poco de teoría para que puedas tener en tus manos toda la información que necesitas conocer antes de comprar este Kingston XS1000. Este SSD portátil pesa 28,7 gramos y mide tan solo 69,54 x 32,58 x 13,5 mm. Tan pequeño como un llavero.
Ofrece una velocidad de lectura de hasta 1.050 MB/s y una velocidad de escritura de 1.000 MB/s. Está disponible en dos capacidades, 1 TB y 2 TB, y también en dos colores, rojo o negro. El material de la carcasa combina metal y plástico.
Utiliza USB 3.2 Gen 2, aunque es retrocompatible con USB 3.2 Gen 1, por lo que no deberías tener problemas con dispositivos más antiguos. Pero lo mejor de todo es que es compatible con una gran variedad de sistemas operativos: Windows® 11, 10, macOS® (v.10.15.x o superior), Linux (v. 4.4.x o superior), Chrome OS™, Android™, iOS/iPadOS® (v. 13 o superior).
Como curiosidad, este dispositivo ganó a principios de año el prestigioso premio Red Dot Award 2024 en la categoría Diseño de producto. Además, dispone de una garantía limitada de cinco años con asistencia técnica gratuita.
¿Me lo compro?
Es cierto que no es un producto económico y que su precio hace que nos paremos a pensarlo un par de veces. Sin embargo, es un producto que nos puede salvar de algún que otro problema y que me parece imprescindible, tanto para viajar como para trabajar.
Aquí te dejamos sus enlaces de compra para que puedas ver su precio, sus ofertas y pedirlo directamente a casa:
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Bonus track: fundas originales del Kingston XS1000
Como consejo extra, te recomiendo que valores la opción de comprar una funda original para poder protegerlo cuando lo llevas en el bolso, en el bolsillo, en la mochila… Tiene acabado gomoso, es muy ligera y viene en un pack con tres colores: azul, naranja y negro.
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Agradecemos a Kingston la cesión de una unidad de este Kingston XS1000 para su análisis.